Cuando el segundo mandato de Florentino Pérez dio su pistoletazo de salida en julio de 2009, el también mandatario de ACS sabía que necesitaba, si quería que el nuevo Madrid galáctico carburase, necesitaba a un jugador que supiera dar salida al esférico, recuperarlo y tratarlo con gusto en la zona del centro del campo. El elegido fue Xabi Alonso.
Además de todas estas cualidades, su buen disparo, sus pases teledirigidos de más de 40 metros y su sacrificio defensivo en todos los encuentros, hacen de él un futbolista imprescindible para cualquier entrenador. Por otra parte, su cordialidad, sus tablas y su educación, tanto dentro como fuera del terreno de juego, hacen de él un futbolista irrepetible. Lleva tan sólo 2 años en el Madrid, pero para muchos es ya uno de los pesos pesados del vestuario.
Hoy, después de haber sido indispensable tanto con Pellegrini como para Mourinho, Xabi Alonso tiene un papel que no tiene calificativo alguno en el equipo: simplemente, de sus botas sale el 80% del fútbol que practica este Real Madrid. Muchos aficionados se acordarán aún de la ausencia de Xabi en el partido que enfrentó al Madrid con el Lyon hace dos años, eliminatoria que a buen seguro habría tenido otro resultado si el mando y la jerarquía del jugador vasco hubiesen estado presentes aquella noche en el campo.
En lo que llevamos de curso, el ex de Liverpool no se ha perdido ni un sólo minuto de los partidos que ha disputado el Madrid. Titular indiscutible en todos los partidos de Liga y Champions (7), Alonso sólo ha sido apercibido con una tarjeta amarilla, a pesar de la función destructiva que también desempeña para el equipo.
La nota negativa, si es que se le puede tildar así, es sobre las dudas que han existido desde su llegada sobre cuál es la pareja adecuada para acompañarle en la medular. Lass, Khedira, Granero, Coentrao... han sido muchos los que han jugado a su lado, pero lo cierto es que Xabi no ha encontrado a un jugador con el que se compenetre como lo hacía con Mascherano en el Liverpool o con Busquets en la selección española. El otro contra se traduce también en sus compañeros, porque ahora mismo el Madrid no dispone de un jugador que pueda suplir la baja de Xabi en un partido medianamente importante, como ya se demostró en varios encuentros de la temporada pasada, y donde Mourinho las pasó canutas para sacar adelante los partidos con jugadores como Granero o Gago haciendo de Xabi. Sahin sigue siendo la única esperanza, pero sus múltiples lesiones han mermado la ilusión que tenía la afición en él y algunos ya ni le esperan.
Es mi criterio personal, pero creo que de su inspiración pasan muchas de las opciones del Madrid por volver a hacerse con el título de Liga o con la ansiada Décima. Alonso, que cumplirá 30 años el próximo mes de noviembre, se encuentra en la cumbre de su carrera profesional, algo que demuestra partido tras partido con exhibiciones de talento en sus pases, kilómetros y kilómetros de recorrido para ayudar a sus compañeros en defensa, y lo más importante, con un manejo del juego del equipo como no hacía ningún jugador en el club desde la marcha del gran Fernando Redondo.
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