Y hoy...como siempre desde hace 5 años, vuelve a repetirse la historia del Madrid en Champions. Otra vez en la Liga de Campeones, dónde el Madrid tenía depositada toda su ilusión y ganas de hacer algo grande en esta temporada, se ha vuelto a pinchar. No está todo perdido, claro que no, pero para que nos vamos a engañar: es muy difícil que al Liverpool se le escape la eliminatoria, y más teniendo en cuenta que la vuelta es en Anfield y que en el banquillo del equipo inglés está Benítez, que sabe manejar estos encuentros como nadie; a los hechos me remito: en las 4 últimas ediciones, 2 finales y una semifinal.
No hemos visto un partido vistoso y con goles; más bien ha sido un encuentro parecido al Inter-Manchester que vimos anoche. Ha sido un encuentro completamente táctico, físico, un uno contra uno en el que el más mínimo error te dejaría en la cuneta, un partido en el que tanto Juande como Benítez han llevado a cabo una batalla táctica, más propia de alfiles y torres de un tablero de ajedrez, del que Benítez ha salido victorioso.
Conforme pasaban los minutos, se veía venir que el partido estaba abocado al 0-0 o como mucho a un resultado corto, tras un error personal o una jugada individual de alguno de los cracks que había sobre el terreno de juego. Heinze cometío una falta tontísima, propia de un juvenil; falta que fue botada por el equipo "Red" y cabeceada por el israelí Benayoun, que, misteriosamente, remató solo, sin que ningún jugador Madridista hiciera nada por evitarlo. Íker no pudo hacer nada. No voy a decir que el Liverpool mereciera perder, por que si alguien puso ocasiones y juego fue el Madrid, sobre todo con un genial Robben que no dejó de intentarlo. De Raúl no se tuvieron muchas noticias.
Ahí se acabó un partido en el que los mejores jugadores merengues fueron, como vienen acostumbrándonos en las últimas semanas, Lass y Pepe. Un equipo en el que sus dos mejores jugadores son un central y su centrocampista defensivo no puede ganar la Champions, por mucho que el bocazas de su presidente en funciones vaticine un 3-0 a favor del equipo merengue.
El Madrid ha demostrado de nuevo que le falta algo de categoría, eso que un día nos trajo Florentino Pérez con Zidane, Figo y cía... esa virtud que te hacía imponer miedo al rival,ese algo más que te hacía ganar los partidos y pasar las eliminatorias y que a día de hoy, y no nos engañemos, el Madrid no tiene. ¿Dónde esta el Madrid de las Copas de Europa? Y otra vez la misma historia temporada tras temporada. Después, pues nada, qué remedio nos queda que ir a por la Liga ¿no?
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